True Blood

La sangre corresponde a un conjunto de componentes químicos y celulares, encargada del transporte y de la defensa de nuestro organismo, sus variaciones en composición (hemostasia) y cantidad (volemia) son determinantes de la homeostasis. Si nos centramos en la relación entre la respuesta inmunológica y la composición química de la sangre, los procesos bioquímicos para coordinar la respuesta inmunológica muestran una integración entre la composición de la membrana celular de los eritrocitos (glicocalix). Cabe destacar la importancia de las reacciones asociadas a las transfusiones y como esta técnica ha permitido mejorar la sobrevida de los pacientes que requieren recuperar la volemia. La identificación de los grupos sanguíneos, la discriminación de la presencia de antígenos específicos (serología) y los procesos que implican la lisis de algunas células sanguíneas o la aglutinación de los eritrocitos, revelan una vez más la complejidad de la bioquímica y la biología celular.