Pasamos de la estimulación a full (muchas imágenes, móviles, etc), en las habitaciones de los recién nacidos, a la interacción con otros. Científicamente comprobado que el contacto con otros influye en un adecuado desarrollo cerebral, además el cerebro infantil no traería desde su vida in útero, una "programación" básica (principalmente motora), sino que además habilidades básicas de aritmética y lenguaje.
La neurulación, corresponde a la etapa embrionaria en donde el ectodermo (capa externa del blastocisto), comienza a formar el sistema nervioso, entre la semana 10 y 26 es un proceso muy activo.
Los recién nacidos pasan de un idioma de balbuceos universal, hasta que a los 7 meses aproximadamente se adquieren los sonidos propios del idioma nativo.
En los recién nacidos habrían núcleos, relacionados con los conceptos numéricos. Posteriormente a los 8 meses, al mejorar las sensaciones visuales, logra conocer y desconocer, lo que intensifica el aprendizaje, lo que está aparejado con las primeras acciones de manipulación de los demás.
Todo lo anterior requiere como aspecto esencial, de un sueño de calidad, no inferior a 12 horas, lo que permita tiempos de grabación de las actividades diarias.
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